Gemoterapia Básica para reiki

Al recibir una piedra, si no nos la regalan preparada por alguien de confianza, o si la compramos debemos hacer la primera limpieza energética o limpieza de shock. No sabemos que energías puede haber absorbido o que programaciones puede tener. Por eso esta limpieza, la más fuerte, hace tabula rasa con todas las energías que pueda contener el mineral. El método es sencillo:

• Escoger un recipiente (bol, vaso…) de cerámica o cristal.
• Poner un poco de sal (se puede usar sal gorda o cualquier otra).
• Disponer los minerales sobre la sal, lo más separados posible si limpiamos varios a
  la vez.
• Cubrir completamente los minerales con sal.
• Dejar reposar 24 horas.
• Sacar los minerales, lavarlos con agua fresca corriente visualizando como el agua
  se lleva la sal y los restos de energías negativa.
• Tirar la sal (y las energías negativas que haya absorbido).
  
  

Después de una limpieza energética debemos cargar los minerales de energía. De esta manera sus propiedades terapéuticas estarán al máximo, ya que después de usarlos y de una buena limpieza estarán “exhaustos”. Con Reiki simplemente:

• Coger los minerales en una mano.
• Cubrir con la otra mano y canalizar Reiki con ambas manos.
• Previamente hay que prepararse (autolimpieza, conexión, protección…).
• Podemos usar los símbolos para cargarlos o sintonizarlos con una energía en
  particular.
• Otra manera de cargarlos, pero sin usar Reiki podría ser:
  Dejarlos que tomen la luz del sol de un día, y la luz de la luna de una noche (con luna
  llena o creciente). Si los dejas sobre tierra (una maceta por ejemplo, tanto mejor)
  

Tras usar un mineral hay que limpiarlo. La periodicidad puede ser inmediatamente después de usarlo en terapia (especialmente con pacientes diferentes) o cada par de semanas si simplemente los llevamos con nosotros mismos durante una temporada. Para saber si están muy cargados confiar en la intuición. Para limpiar:

• Usar siempre la visualización, imaginad la energía negativa como una niebla,
  nube, pequeñas bolas oscuras, fluidos… y como, gracias al método usado,
  desaparece.
• El método más recomendado consiste en pasar el mineral por el humo de un
  incienso prendido.
• Otros métodos son: pasarlo por el calor de la llama de una vela o dejarlo bajo un
  chorro de agua fría.

En Reiki usaremos los minerales para ayudarnos a equilibrar los diferentes chakras. Después de identificar un o dos que debemos trabajar (conversando con el paciente y/o mediante la sensibilidad de nuestras manos) escogeremos el mineral adecuado. Simplemente nos guiaremos por el color del chakra. El mineral se puede dejar sobre el chakra o su área de influencia durante la terapia, o mientras hacemos Reiki en la zona. Nos limitamos al chakra o par de chakras que más necesidad de terapia tengan. Podemos utilizar todas las piedras para nosotros mismos, jugando con ellas, sintiendo su energía, meditando en los chakras...

También podemos entregar a una persona una piedra preparada, según el color de un chakra determinado, a una persona que la pueda necesitar. Simplemente la llevará encima, entre sus cosas, cerca de su cuerpo, y le informaremos de como limpiarla y cargarla de vez en cuando.

A veces una piedra se nos cae por casualidad, se rompe sola o se ve gastada y descolorida. Esto nos indica que la piedra ya ha cumplido su cometido con nosotros. Podemos considerar que el fragmento más grande todavía es útil (si no es un canto rodado). Cuando no debemos usar más una piedra, lo que hacemos es agradecer todo lo que ha hecho por nosotros y volverla a la naturaleza, enterrándola en el campo, en la playa o dejándola en el lecho de un río.